El hoy alcalde de Alcorcón, David Pérez, fue durante un tiempo, «martillo de herejes» sindicalistas y rojos en general como portavoz del PP en la Comisión de Control de Telemadrid en la Asamblea primero y luego, como portavoz del grupo parlamentario popular en el parlamento regional.
Pérez presumía de que «Telemadrid es el canal autonómico más plural y riguroso de España». Y acusaba a la oposición de «querer silenciar, anular, amordazar, cerrar y dinamitar a Telemadrid, un medio de comunicación que no se pliega a los dictados e intereses del Gobierno».
Su compromiso con el partido le valió a Pérez, según ha denunciado esta semana la cadena SER, llevarse un sobresueldo de casi 33.000 euros en 2010 y otros 13.000 en 2011.Una ayuda por si no le alcanzaba su sueldo de 5.300 euros brutos mensuales en la Asamblea de Madrid. Todo tan normal para Pérez como que los viceconsejeros que eran diputados cobraran por las dos cosas: «Lo que reciben los viceconsejeros de la Asamblea en concepto de retribución se debe a que realizan funciones distintas y ocurre en todos los sitios». Pérez y el PP también rechazaron entonces la propuesta de la oposición de eliminar las dietas de los diputados en los consejos de administración.
Un trabajo bien remunerado sin duda el de Pérez, que entre otras cosas, consistió en avalar en la Asamblea de Madrid en 2007, una operación que entonces calificó de ruinosa el socialista Rafael Simancas, pero que el hoy alcalde vio «rentable y avalada por los técnicos»: la creación de una sociedad, MADRID DEPORTE AUDIOVISUAL, con el objeto de comprar los derechos audiovisuales del Atlético de Madrid y el Getafe por 300 millones de euros. En esa sociedad Telemadrid participaba con el 49% del accionariado y Caja Madrid con el 47,5%. 300 millones por un acuerdo 5 temporadas, 2009-2010 a 2013-2014, de los cuales 70 fueron para el Getafe y 230 para el Atlético de Madrid, lo que prácticamente equivale a la deuda del Ente Público Radio Televisión Madrid.
Pero LA OPERACIÓN FUE TAN DESASTROSA QUE AGUIRRE DIO LA ORDEN DE RESCINDIR EL CONTRATO UNA TEMPORADA ANTES DE LO PREVISTO y la cadena renunciaba sorpresivamente a esos derechos en mayo de 2012. Justo el 18 de ese mismo mes, el ya presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González anunciaba que iba a hacer un ERE en Telemadrid, que se materializaría en enero de 2013 con 829 despidos «por razones económicas».