Desgraciadamente la hoja de ruta impuesta por el PP en Telemadrid (saldada con 861 despidos y un ERE no ajustado a derecho) se está repitiendo paso a paso. La audiencia de TVE ya está por debajo del 10%, los telediarios de la 1 están por detrás de los de Telecinco y Antena 3, los números rojos de la Corporación llegan ya a los 716 millones de euros, se quiere cerrar el canal TeleDeporte, se plantea reducir el número de centros territoriales y reducir la plantilla con un plan de «bajas incentivadas amortizables». Y todo a pesar de que los trabajadores acaban de aceptar un fuerte ajuste económico en el último convenio.

Pero no pasa nada. Los responsables del desastre siguen en TVE. Como siguen en Telemadrid. Y como sigue Julio Somoano contra viento y marea. Y es que no hay nada como ser protegido especial de la mujer del ex presidente Aznar y actual alcaldesa de Madrid. Para algo los lazos familiares de los Somoano y los Botella son viejos y estrechos.

Se salvará don Julio. Pero perderán los trabajadores de TVE, el periodismo y el servicio público audiovisual español.