Hombre, dirá usted que en Telemadrid también se dan malas noticias. Correcto. Noticias malas como «Paralizan los trabajos con cadáveres en la Complutense por hacinamiento» ( ojo que aquí hablamos del malvado rector de la Complutense José Carrillo hijo del susodicho líder comunista), «Detenido en Villalba un hombre como presunto autor de un homicidio en Barcelona» ( ¡Ajá! El delito se cometió … en Barcelona. No diga más) o «Hace 34 años que Las Ventas no suspendía una corrida por baja de los toreros» ( pero ya sabemos gracias a Telemadrid que «Los toros nacen por y para agredir». Vamos, unos antisistema proetarras es lo que son estos astados) .

Y todo así en los informativos de esta cadena (que pese a quien pese sigue siendo pública) desde que hace diez años ocupara el despacho de la Puerta del Sol esa adalid de la seguridad vial llamada Esperanza Aguirre.

Una improba labor de agitación y propaganda a la que se sigue dedicando en cuerpo y alma el gobierno del heredero Ignacio González y sus directivos de Telemadrid.

Entretanto 861 trabajadores siguen despedidos y siguen esperando a que el Tribunal Supremo publique la sentencia que declara no ajustado a derecho el ERE. O lo que es lo mismo, ilegal.