Algo huele a podrido en los despidos de Telemadrid
El próximo día 15 de julio, el Director General de Telemadrid, José Antonio Sánchez, comparece ante un juez imputado por cinco delitos muy graves: contra los derechos de las trabajadoras y los trabajadores, prevaricación, tráfico de influencias, malversación de fondos públicos y un delito societario.
Y es que Sánchez, directivo en excedencia de Telefónica , ha entregado SIN CONCURSO la realización de la señal de Telemadrid a una filial de Telefónica, TSA, para sustituir con trabajadores subcontratados a los 829 despedidos (por burofax y a la carrera) en un ERE declarado por el TSJM como no ajustado a derecho. Más de 300.000 euros al mes está pagando Telemadrid desde el mes de enero. Buen negocio… para la multinacional.
Como fueron buenos negocios los 11 contratos fraccionados de Telemadrid con la trama Gürtel entre 2004 y 2008.
O para Viajes Marsans, cuando era propiedad del hoy condenado Díaz-Ferrán, que tuvo durante mucho tiempo la exclusividad de los viajes de Telemadrid.
O para Sánchez Dragó, Ernesto Sáenz de Buruaga o José Luis Garci, buenos amigos de la expresidenta Aguirre, que consiguieron millonarios contratos con Telemadrid.
Y sobre todo gran negocio el de Telemadrid para las empresas de Enrique Cerezo, amigo del hoy Presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González. Un contrato de 230 millones de euros por los derechos del Atlético de Madrid pagado en colaboración con Caja Madrid a través de una sociedad creada ex profeso de nombre Madrid Deporte Audiovisual hoy quebrada. Buen negocio para Cerezo y ruina para Telemadrid.
O la compra también a Cerezo, de un gigantesco paquete de películas que abastecen el «videoclub» en que se ha convertido la nueva mini Telemadrid post ERE.
Por no hablar de la gestión de la publicidad de Telemadrid, participada en Multipark por… otra empresa de Cerezo, Boomerang. Resultado, la publicidad en nuestra cadena en caída libre y la excusa perfecta para que las consultoras DeloitteCuatrecasas, justificaran (con la firma de la cuñada del Presidente González) la necesidad del ERE en Telemadrid.
Todo una maquinaria puesta en marcha con el «Tamayazo» de 2003, con la que Telemadrid ha sido explotada sin pudor ni piedad por empresarios cercanos al poder regional hasta que, cumplida esa función, se desguaza, se reduce a la mínima expresión y se pone en la calle al 80 por ciento de sus trabajadores por razones … «económicas» sí, pero de la economía de los expertos en sacar tajada de lo público a costa del dinero de todos los ciudadanos y del sufrimiento de los trabajadores despedidos injustamente.