La Sección Sindical de UGT en Telemadrid ha interpuesto esta semana sendas denuncias ante la Comisión Nacional de la Competencia y la Inspección de Trabajo frente a la publicación del pliego de licitación del servicio de asesoramiento en el proceso de «adecuar el EPRTVM al mercado». Como ya adelantamos en nuestro número anterior, entendemos que PWC, la empresa en la que trabaja Isabel Linares, la anterior Directora General de Telemadrid, tiene todas las papeletas para llevarse la concesión de este estudio, hecho en el que concurrirían numerosas irregularidades jurídicas.

Asimismo, creemos que ya desde la misma entrega del citado pliego a la representación sindical se ha vulnerado al menos el artículo 64 del Estatuto de los Trabajadores, al no habérsenos facilitado ninguna información más.

Aprovechando este aperitivo judicial queremos recuperar, en un formato adaptado a la era catódica, una célebre sección que pasó por muchas revistas: La Cárcel de Papel

«En Madrid, a 7 de septiembre de 2012, reunidos los miembros del Tribunal contra la Manipulación y el Mal Gusto, para juzgar a Esperanza Aguirre,

CONSIDERANDO que la encausada ha repetido reiteradamente (la última vez, el 22 de junio) que ella nunca había dado instrucciones a Telemadrid, y

RESULTANDO que, en uno de los videos que han aparecido estos días por Internet, demuestra con palabras y hechos que ella decide cada cobertura que da la cadena pública sobre su persona, llegando a mascullar: «¡Pero si yo he dicho que no dijeran nada!»,

Sin necesitar más evidencias, hemos decidido FALLAR Y CONDENAR a Doña Esperanza Aguirre y Gil de Biedma, condesa de Murillo y Grande de España, a la pena de DEVOLVER TELEMADRID A LOS MADRILEÑOS, así como al castigo complementario de leer las obras completas de Fernando Sánchez Dragó».