El PP va a por los medios públicos

Y ahora toca RTVM. No es la primera vez que se habla de privatización, ya lo hizo Alberto Ruiz-Gallardón, cuando era presidente de la Comunidad de Madrid y gobernaba Aznar con mayoría absoluta. En aquel momento no cristalizaron las intenciones de Ruiz-Gallardón porque Aznar no modificó la Ley del Tercer Canal y con ello no posibilitó la privatización de las cadenas autonómicas. Ahora si ha habido cambio normativo, ya que el Gobierno que preside Mariano Rajoy ha llevado al Congreso una propuesta para cambiar la Ley Audiovisual y facilitar así, entre otras posibilidades, la externalización de los servicios informativos y la privatización de estas empresas de comunicación públicas. Además, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha comunicado a UGT y CCOO la intención que tiene el gobierno madrileño de hacer un ERE en RTVM, lo que unido a las continuas manifestaciones públicas de él mismo y de la presidenta Esperanza Aguirre, insistiendo en que hay que privatizar RTVM pone tanto a la plantilla como a la propia cadena en una situación muy delicada.

Pero ¿Por qué hemos llegado a este punto? ¿Por qué hay que hacer un ERE o privatizar RTVM cuando es, según los propios datos económicos de la Comunidad de Madrid, la radiotelevisión autonómica que menos cuesta -17 euros por madrileño al año- a sus ciudadanos? ¿Es que no han hecho ya suficientes esfuerzos económicos los trabajadores de RTVM, a los que se les descuenta un 5% de su salario desde mayo del 2010? ¿Es que no se ha producido una reducción de plantilla de 250 trabajadores y se han reducido los gastos de personal un 15% desde el 2007? ¿Por qué el 30% de los gastos de personal corresponde al 10% de la plantilla que está compuesto por directivos y contratos de libre designación y fuera de convenio? Estos datos los han hecho públicos los sindicatos con representación en RTVM ¿Por qué el director general de RTVM tiene un salario –según publicó la sección sindical de UGT en RTVM el pasado 11 de mayo en su boletín informativo semanal que lleva por título «La parabólica»- de 170.319,54 euros frente a los 78.185.04 que gana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy o los 108.511 euros que tiene de salario la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre? ¿Por qué el PP de Madrid pretende privatizar RTVM y otros dirigentes del Partido Popular defienden lo contrario en otras Autonomías? por poner un ejemplo ni en Galicia ni en el País Valenciano se han planteado la privatización de sus empresas audiovisuales de carácter público. ¿Acaso los madrileños somos ciudadanos de segunda y no merecemos una radiotelevisión pública? ¿Por qué el Gobierno utiliza para estos cambios legales la vía de urgencia en el trámite parlamentario, hecho que podría vulnerar nuestra Constitución?

Son muchas preguntas y pocas respuestas. Pero creo que tenemos alguna certeza. En el caso de RTVM no es tanto una cuestión económica sino política. Si se tratara de ser más eficaces económicamente hablando o de optimizar recursos humanos estoy convencido de que se llegarían a acuerdos con los sindicatos que no significarían pérdidas de empleo y que dotarían de un buen proyecto de futuro para RTVM. Nos encontramos en el caso de RTVM ante una postura política con un claro sesgo ideológico. Los dirigentes del PP de Madrid no estiman necesario el mantenimiento de RTVM.

Y esto es preocupante -ya no sólo para los ciudadanos madrileños que podrían perder una información de proximidad, de su cultura, de sus pueblos, etc.-, sino también para el frágil ecosistema de los medios de comunicación que en nuestro país ya está bastante escorado a la derecha, sobre todo tras los cierres de «CNN+» y el diario «Público». Si a esto añadimos, insisto, la degradación, precarización, y la posibilidad de externalizar los servicios informativos o privatizar los medios de comunicación públicos nos encontramos con un panorama que va a suponer pérdida de empleo, en un sector ya muy castigado por la crisis, y que va a afectar a la pluralidad informativa y a la calidad de nuestra democracia.

*Mariano Rivero, es coordinador de la Agrupación de Periodistas de UGT