UGT ha puesto en marcha la campaña «Ponte a mil» para reivindicar que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) suba progresivamente hasta los 1.000 euros al mes de aquí a 2020, frente a los 707,70 euros actuales.  UGT considera «insostenible» que casi la mitad de los asalariados -7,6 millones de trabajadores- no llegue siquiera a ser mileurista.

Por cada SMI actual la Seguridad Social ingresa cada año 2.804 euros en cotizaciones, mientras que si el salario mínimo subiese a los 1.000 euros mensuales se ingresarían 3.962 euros anuales. Y según los datos que maneja UGT  a partir de Decil de salarios (2015) EPA y la Encuesta de Presupuestos Familiares 2016 del INE, el salario que percibe el 10% de los trabajadores que menos ganan -empleados a tiempo parcial con unos ingresos mensuales netos medios de 330 euros en 14 pagas- está por debajo de los 350 euros de media al mes que se destinan a la alimentación.

Es pues el momento de que el Gobierno tenga en cuenta esta propuesta en los próximos presupuestos y que la patronal la incorpore de cara a la negociación colectiva de 2018.