Por no hablar de la fijación de Telemadrid con Venezuela, el chavismo y su relación con Podemos. Han convertido esta cadena en una particular TeleCaracas donde lo madrileño, al menos lo que no interesa al PP, queda en un segundo plano.

No seremos nosotros quienes idealicen al gobierno de Maduro y el chavismo. Pero no parece de recibo que una televisión pública se ponga al servicio del argumentario de un partido, el PP, para agitar el espantajo de la represión, la dictadura y el hambre en Venezuela como ejemplo de lo que podría pasar en España si gobernase Podemos.

Un empeño al que Telemadrid se dedica en cuerpo y alma. Y si hay que pagar una excursión a Venezuela al Ciudadano Cake (ese reportero que en la cadena ultra InterEconomía promocionaban como «el follonero de la derecha» y que ahora tiene un programa en Telemadrid 100 por 100 externalizado de coste desconocido para el Comité de Empresa) pues se le paga. Que para eso parece que ahora sí hay dinero después de 861 despidos con un ERE por supuestas «razones económicas». Dos semanas seguidas ha estado el Ciudadano Cake con su especial «¿Podemos ser Venezuela?». Ahí es nada.

Y como no hay dos sin tres, esta semana el Ciudadano Cake ha vuelto a dedicar su programa a Podemos, situando al partido de Pablo Iglesias «Bajo sospecha». Es curioso que Telemadrid, donde los temas relacionados con la presunta financiación ilegal del PP o bochornosos casos de presunta corrupción que salpican a destacados populares como la Operación Púnica, la Gürtel o el ático del presidente Ignacio González son sistemáticamente minimizados o directamente, escondidos bajo las alfombras de las escaletas.

El contenido del reportaje del señor Minuesa queda muy claro viendo la web de Telemadrid : » Ante la singularidad del caso político que ha supuesto la irrupción de Podemos, Ciudadano Cake indaga sobre la evolución del grupo liderado por Pablo Iglesias, desde que empezó a gestarse, hasta lo que es hoy, una organización más cercana a lo que ellos mismos cuestionaban de los otros partidos políticos y sus representantes. Qué autoridad se confieren para denunciar el comportamiento de los demás, quiénes son, cómo se organizan y quién finanza a este partido que ha cuajado y ha conectado con los ciudadanos con un discurso sospechosamente populista, es lo que pregunta Cake Minuesa a profesionales de distintos ámbitos.»

Nada es blanco o negro. Y el buen periodismo es el que busca los grises, los matices, las aristas y las distintas caras de la noticia. Pero hace tiempo que lo de Telemadrid tiene poco que ver con la pluralidad, el rigor o la veracidad a la que nos obliga la propia Ley de creación del Ente Público Radio Televisión Madrid.