Leemos en Vanitatis: «Eran amigas de universidad, las llamaban las «nueve magníficas» y algunas de ellas han acabado en puestos de gran responsabilidad. Se trata de Ana, Concha, Chus, Esther, Isabel, Juana, Lola, María y Teresa, el círculo de amigas de la Universidad de Ana Botella. La alcaldesa coincidió en aquellos años mozos con las que luego serían, por ejemplo, la exdirectora del Instituto de la Mujer, Concha Dancausa, la exdirectora de Telemadrid, Isabel Linares, o la directora general de Familia del Ayto. de Madrid, Lola Flores. Por aquel entonces no eran más que unas jovencitas que acabarían ocupando puestos de relevancia en el Partido Popular, lo cual despertó no pocas maledicencias y rumores sobre su efectividad en el cargo». Vemos, pues, que el entorno de Ana Botella no tiene problemas de desempleo: su ahijado, Julio Somoano, también está bien colocado en RTVE. El viernes mismo, en una inauguración en el Manzanares, la alcaldesa fue abucheada por los trabajadores del Ayuntamiento, que, como los bomberos que la recibieron con protestas en las fiestas de la Paloma, también son víctimas del desmantelamiento de lo público.

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