y ha asumido una constante pérdida de capacidad adquisitiva en sus nóminas y en sus derechos sociales y laborales. Pero, sobre todo, al señor González se le olvida que el 30 por ciento de esos gastos de personal que ahora hay que recortar, lo genera el 10 por ciento de la plantilla formada por directivos y contratados discrecionalmente fuera de convenio.

Ahora la Comunidad de Madrid pretende que los trabajadores del Ente Público Radio Televisión Madrid paguemos la pésima gestión de los directivos nombrados por el propio Gobierno de Esperanza Aguirre y esto no lo vamos a aceptar en la sección sindical de UGT. Pero no nos cerramos al diálogo. Estamos dispuestos a negociar, pero sobre un proyecto de futuro que no suponga la pérdida de empleo y que haga viable social y económicamente la continuidad del servicio público de radio y televisión en la Comunidad de Madrid. Un servicio público sobre el que la propia Presidenta de la Comunidad de Madrid no se ha cansado de repetir desde hace años que es el más barato de España.