Isabel San Sebastian viene de Bilbao
El 8 de agosto de 1990 Anson ya informaba en las páginas de huecograbado de su diario, que redactaba él mismo: «Los principales medios internacionales destacaron ayer la primicia mundial conseguida por Isabel San Sebastián en ABC al localizar al diseñador de luces del Ballet Nacional de Cuba». Muy pronto (en noviembre del mismo año) la bisoña periodista fue acusada de publicar una conversación off the record con el entonces rector de la Complutense, Gustavo Villapalos, a lo que Luis Maria Anson contestó en las páginas de su diario que «la autora de la entrevista, Isabel San Sebastián, es una de las profesionales más prestigiosas del periodismo español. (…) Nuestra felicitación, pues, a Isabel San Sebastián por su rigor profesional». Apenas tres años corrigiendo los teletipos de internacional del periódico y ya era una de las «profesionales más prestigiosas del periodismo español».
Los ditirambos de Luis María se han multiplicado desde entonces (siendo una habitual de la sección de pago Las caras de la noticia en el tiempo en que fue gestionada por los ansones) y han llegado hasta niveles realmente sonrojantes cuando su protegida ha venido a publicar alguno de sus mediocres folletines históricos (publicados por la división editorial de El Mundo, periódico en el que casualmente colabora): «Isabel San Sebastián es una intelectual ojo avizor a su tiempo, una periodista sagaz, una escritora excelente y, ahora, una novelista imaginativa y sorprendente»; «el nivel literario de Isabel San Sebastián ha crecido como el manantial incesante que alimenta el río caudal. Son ya muchos los aciertos de la joven novelista. En La visigoda ofrecía muestras inequívocas de su calidad literaria y de su imaginación fabuladora. Tal vez porque, al decir del poeta amigo, «su corazón es una fruta con sabor de olas y racimos en la boca», Isabel San Sebastián granó en su novela Astur. Yo saludo desde esta sección a (la novela) Imperator, a la espera de que la crítica especializada la instale en el lugar que le corresponde. Me parece de justicia anticipar que el vigor literario de Isabel San Sebastián ha colocado ya a la novelista en lugar destacado de la narrativa actual (10-9-2010)». Ni qué decir tiene que ni siquiera en ese mismo suplemento cultural fundado por Anson (y publicado por El Mundo) se han atrevido a escribir alguna reseña positiva a cualquiera de las muestras de literatura de saldo despachadas por la susodicha, que son relegadas en las librerías a los estantes de subgéneros. Para terminar el repaso a su faceta literaria, recordar la biografía de su protector: «Mayor Oreja, una victoria frente al miedo»
El salto de Isabel a la televisión se produjo, casualidad, al poco de ganar Aznar sus primeras elecciones generales y con Ernesto Sáenz de Buruaga como director de informativos, teniendo su programa «El tercer grado» como primera invitada nada más y nada menos que a doña Ana Botella. Toda su carrera de presentadora la ha desarrollado después en medios públicos, si exceptuamos su breve etapa en «El primer café» de Antena 3 cuando dirigía la cadena… Buruaga.
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